Intensas protestas estallaron en Los Ángeles tras redadas migratorias ordenadas por Donald Trump, que resultaron en la detención de al menos 121 personas, en su mayoría latinas, en operativos liderados por el ICE en zonas como Paramount y el distrito de la moda. Las redadas provocaron enfrentamientos entre manifestantes y agentes federales, con uso de gases lacrimógenos y granadas aturdidoras. En respuesta a los disturbios, Trump desplegó 2,000 efectivos de la Guardia Nacional, lo que generó una fuerte crítica por parte del gobernador de California, Gavin Newsom, quien acusó al gobierno federal de agravar la tensión. Estos hechos reflejan el profundo conflicto entre las políticas migratorias del gobierno federal y las comunidades locales.







